Consuelo Barragán Flores

Inventa, se ilusiona, la perfección es su pasión y  aunque no la alcanza se rinde ante la imperfección de su realidad. Se consuela sabedora que tal imperfección le dará ocupación. Cae incesante en una lucha de poderes Y aunque su enemigo se muestra lucido y transparente no sabe como acallarlo. Sabe que va perdiendo la batalla, el terror de perder la paraliza Una angelical sonrisa surge de las profundidades y la recibe con vehemente amor. Es el corazón que suavemente exhala: -para, simplemente para. Ambos somos el poder, ambos somos la magia, ambos poseemos el misterio, perdámonos abrazados de la mano de Dios. Entonces la mente ordinaria se vuelve extraordinaria.

Cuando vives en lo múltiple, yendo en varias direcciones simultáneamente, te divides en partes, y entonces no estás ín­tegro. Entonces un deseo te lleva al sur, otro deseo te lleva al norte; una parte de la mente ama y la otra parte de la mente odia; una parte de la mente quiere acumular riquezas y otra dice: «Esto es inútil, ¡Renuncia!». Entonces una de las mentes quiere meditar, volverse profunda, volverse silenciosa, y otra mente dice: «¿Por qué pierdes el tiempo?».

Cuando te das cuenta de la belleza del mundo..., todo es joven, fresco y vivo, ¡y Dios está aquí! No buscas en ninguna otra parte, si vas a otro sitio estarás escuchando a la men­te, porque ese es el lenguaje de la mente: «En otro sitio, otro sitio. Nunca aquí». Y él está siempre aquí. La belleza te revela que está aquí y ahora. Entonces la mente ordinaria se con­vierte en la más extraordinaria, y la vida ordinaria se convier­te en la suprema, la superior. La única diferencia radica en una mente cerrada o abierta de ti depende encontrarlo, sentirlo, vibrar en él. Ahora mismo esta aquí, adentro….solo baja la mirada al corazón…está esperando.

Burdas, toscas y hasta incoherentes salían de mis dedos las primeras letras. Emanadas quizá de la mente traicionera urgiéndome hacer algo. O tal vez la desesperación del alma aclamando una nueva ruta de celebración. Quizá el espíritu aventurero que se negaba morir explayándose con tonterías baratas e incoherentes. No, lo sé, ni deseo averiguarlo, en este instante solo me place arrojarme en las hermosas profundidades de mi Ser, en el brillante iniciar,  en el  lila amanecer de la vida y el hermoso movimiento de mis dedos que vibran dejando huella de la letra que ahora brota de las profundidades  cual aura de misterio y dicha

La pureza verdadera es como un niño inocente; inocente en cuanto a lo que es bueno y lo que es malo; inocente res­pecto de toda distinción. La inocencia florece únicamente cuando la existencia es indivisa. La aceptas tal cual. No escoges, no divides, no esta­bleces ninguna distinción. En realidad no sabes lo que es bue­no y lo que es malo. Si lo sabes, calcularás, y la pureza será entonces un artificio, no una floración. En pocas palabras un hombre de pureza ni lucha ni se rinde.

La profundidad es lo que viene de tu ser. La palabra puede ser usada por cualquiera. El placer nunca llega tan hondo como el dolor. No puede, la naturaleza misma del placer es superficial. Por eso la gente que vive en el placer siempre sigue siendo super­ficial, carece de hondura. No puedes encontrar profundidad en un hombre que solo busca la riqueza, es difícil. Puedes encontrarla en un mendigo  quizá no miras al mendigo porque piensas que no es alguien que no valga la pena; pero no estés tan seguro de tus ideas. Cuando un mendigo pasa por tu lado, ¡observa! Ha sufrido mucho, ha vivido un gran dolor, y el dolor da profundidad. Un hombre rico es siempre superficial, sin hondura: ha vivido en el placer. El placer no puede calar hondo. Y solo cuanto tocas fondo aprecias la profundidad que te habita.

A veces deseo que mis ojos se cierren, mi oídos ensordezcan y mi lengua pare, sencillamente pare. Salir al mundo a contactar es tocar la realidad humana; árboles talados, gente urgida por conseguir una moneda, o luchando por un lugarcito para vender, calladamente cumpliendo órdenes para obtener el sustento del día. Es la realidad que tocan mis ojos, mis oídos se niegan a ensordecer  y la piel se acalora al sentir  tal deshumanización. De nada sirven los pesares, en nada contribuyen los señalamientos, aun cuando todo se torne gris e impenetrable una luz celestial me dicta los pasos que he de dar ante tal realidad humana. Construir en lugar de destruir. Compartir en lugar de almacenar. Ante un árbol que talen; mis manos protegeran a otro. Ante un pajarillo que cacen; mis manos alimentaran a más de uno. Ante una flor que corten; regare y protegeré más de una. Soñare que erijo mi templo. Imaginare que construyo el paraíso. Alucina

Tanto los hombres, como las mujeres deberían de ser tan suaves como un pétalo de rosa y tan duros como una roca juntos. Si la situación necesita que sean una roca, estarán listos; si la situación necesita que sean un pétalo de rosa, estarán listos. La hermosa flexibilidad entre el pétalo de rosa y la roca enriquecerá sus vidas.

E s muy difícil para una mujer tomar decisiones, porque es más fluida, más un proceso y menos una roca. Esa es su belleza y gracia. Es más pareci­da a un río, no para de cambiar. El hombre es más sólido, más directo, seguro, decisivo. De modo que siempre que sean necesarias decisiones, es­cucha a un hombre. Y cuando no se necesiten decisiones, sino flotar a la deriva, entonces es la mujer la que puede ayudar al hombre a escuchar­la a ella. La mente femenina puede revelar muchos misterios, igual que la mente masculina puede re­velar muchos misterios; pero así como existe un conflicto entre la ciencia y la religión, de la mis­ma manera hay un conflicto entre el hombre y la mujer. Quizas un día el hombre y la mujer se complementen en vez de estar en conflicto, pe­ro ese será el mismo día en que la ciencia y la re­ligión también se complementen. La ciencia  es­cuchará con comprensión lo que diga la religión, y la religión escuchará con comprensión lo que diga la ciencia. No habrá in

Cuando aceptas tu total soledad es­tás liberado; deja de existir el apego, el amor puede fluir. En realidad, sólo en ese momento puede fluir el amor, porque en­tonces el amor no es una dependencia, tú no dependes del otro. Si eres dependiente del otro, entonces también estarás en con­tra de él, porque todo cuanto te hace dependiente es el enemi­go, no puede ser el amigo. Por eso los amantes se pelean conti­nuamente, porque el amante es el enemigo. Te has vuelto dependiente, no puedes vivir sin el otro, tu libertad ha sido des­truida, y todo amor que destruye la libertad se convertirá, tarde o temprano, en odio. Sólo el amor que te da libertad nunca se convertirá en odio, será eterno. Por eso sólo un Jesús puede amar eternamente. No hay cambio de clima, la misma armonía con­tinúa. ¿Por qué? Porque un Jesús alcanzo la soledad total y acepto este hecho. Estar totalmente solo, como un Everest. En la cima, estás solo. En el núcleo, el ser más íntimo, es­tás solo. Cuando lo has acep

E l corazón sigue siendo primitivo. Y es bueno que las universidades no hayan encontrado todavía un modo de enseñar al corazón y de vol­verlo civilizado. Es la única esperanza que tiene la humanidad para sobrevivir . 

"La gente auténtica nunca es apreciada, porque una persona auténtica es rebelde. No imitará a nadie"

¿Qué tonterías pasan por una mujer? Sí, son tonterías porque, para un hombre, las cosas debe­rían tener una explicación racional. «¿Por qué estás triste?». Una mujer simplemente responde: «Me siento triste». A un hombre le resulta impo­sible entenderlo. Ha de haber alguna razón para estar triste. Una mujer simplemente contesta que se siente triste. Vive a través de los estados de ánimo. Por supuesto, a un hombre le resulta difícil vivir con una mujer... porque si las cosas son ra­cionales, se pueden manejar. Si son irracionales, si surgen de la nada, resultan muy difíciles de manejar. Ningún hombre ha sido jamás capaz de manejar a una mujer. Al final termina por rendir­se; abandona todo el esfuerzo por  manejar los estados emocionales de una mujer. Y esa es nuestra mayor virtud....no intentes entendernos...

El origen está dentro de ti; la vida está allí fluyendo, latiendo, palpitando continuamente en tu interior. ¿Por qué preguntar a otros? sobre ti mismo.  Es un absurdo absoluto pre­guntar sobre ti. Preguntar significa: buscar la respuesta.  iY tú eres la respuesta!          

Aquí  tienes mi templo, aquí  tienes mi  religión, décadas  y  décadas buscando en la periferia aclamando ser escuchada pidiendo por favor, por favor, no mas con el cuerpo lacio con el alma acongojada, Entonces.... solo me acurruque entre mi piel, entre el suave aroma espiritual, entre el cálido susurro de las almas que acompañan mi despertar, entonces lo vi, lo  descubrí, lo  sentí, abrazándome  bajo una radiante luz y una paz infinita entonces mi templo se ilumino

La mente del hombre sigue un curso zigza­gueante, la de la mujer un curso recto como una flecha. Ella no escucha lo que dices, sino que te mira a los ojos. Presta atención al modo en que dices las cosas. Percibe tu mano tembloro­sa, ve que tus ojos intentan evitarla. No es­cucha lo que dices; eso es irrelevante... sabe que se trata de una historia que haz logra­do inventar en el camino a casa. Ella esta más sincronizada con tu lenguaje corporal. Y este es más auténtico, porque aún no puedes controlarlo y engañar con él. E l hombre es capaz de abordar cualquier pro­ blema de un modo intelectual. Le tiene mie­do a la mujer porque el modo en que ella aborda un problema es muy intuitivo, instintivo. Ningu­ na mujer es intelectual, inteligente, desde luego, pero no intelectual. La inteligencia del hombre es de un tipo, y la inteligencia de la mujer es de un tipo totalmente diferente. La inteligencia del hombre es la esencia de su intelecto, y la inteli­gencia de la mujer nace de su po

Delicadamente urgió a mis sentidos abrir las persianas… Ha confabulado con el cosmos para darme un hermoso saludo, sabe de que está constituida cada una de mis partículas y apuesta a tocar la mirada de una mujer…. Extasiante, alucinante, y hermoso es el colorido que despliega en el cielo como urgiendo a mis ojos posarlos en el. Y lo logra, siempre lo logra… Un aura de misterio corona sus grandiosos rayos entre azulados y blanquecinos bajo un pequeño espectro que se asoma a mi ventana. Esplendoroso sol que cada amanecer obsequias a la mirada esa despiadada energía, como recordándome la belleza que habita el alma de cualquier mortal

La intimidad con una mujer o con un hombre es mejor que tener muchas relaciones superficia­les. El amor no es una flor de temporada, requie­re años para crecer. Y solo cuando crece va más allá de la biología y empieza a tener algo de lo espiritual en su naturaleza. Estar con muchas mu­jeres o con muchos hombres te mantendrá super­ficial; quizá satisfechos, pero superficial; ocupados, desde luego, pero no de un modo que te vaya a ayudar en el crecimiento interior. Una relación de uno a uno...sostenida aporta un beneficio tremendo. Cada persona es un misterio infinito, inagotable, insondable, de modo que no es posible que alguna vez digas: «La he conocido», o: «Lo he conocido». Como mucho, podrás decir: «He intentado todo lo que he podido; pero el misterio sigue siendo un misterio». De hecho, cuanto más conoces, más misteriosa se vuelve la otra persona. Entonces el amor es una aventura constante. El mundo seria mejor, con personas más concientes, con un poco más de iluminación e

El hombre solo no será capaz de llegar muy lejos. La mujer sola simplemente será un estan­que de energía sin posibilidad alguna de movi­miento dinámico. Cuando ambos están juntos son complementarios. Ninguno está por encima del otro. Los complementarios jamás están arriba o abajo, son iguales. Juntos conforman un todo, y juntos pueden crear una santidad que no resulta posible para ninguno por separado. Un hombre, para ser realmente masculino, ha de ser aventurero, creativo, ha de ser capaz de to­car tantas iniciativas en la vida como le sea posi­ble. La mujer, para ser de verdad una mujer, ha de ser un estanque de energía detrás del hombre, para que la aventura pueda disponer de tanta energía como sea posible. La energía será necesaria para que la aventura pueda tener cierta inspiración, cierta poesía, de modo que el alma aventurera pue­da relajarse en la mujer y verse rellenada con vida, rejuvenecida. El hombre y la mujer, juntos, moviéndose de manera positiva, son un todo. Y

Yo no creo en absoluto en el carácter. Deposito mi confianza en la conciencia. Cuando una persona se hace más consciente, su carácter se transforma. Pero esa transformación es completamente distinta. No está controlada por la mente; es algo natural, espontáneo. Y siempre que el carácter es natural y espontaneo posee una belleza propia; entonces…cambias, abandonas la ira. La gente normal se enfada de vez en cuando, y esa ira es fugaz, es momentánea. Después vuelven a reírse, vuelven a ser amables; las heridas no les duran mucho, En los ambiciosos su ira es permanente. Simplemente están enfadados, y por nada en especial. Han reprimido tanto la ira que simplemente están enfadados, en un estado permanente de furia. Se mira en sus ojos, se mira en su nariz, en su cara, en su modo de vida. Solo la conciencia te lleva a sentir y soltar la ira, el  carácter  es temperamental y se aferra a la ira. Por ello te digo; "si vives en la conciencia, realmente vives"

Antes miraba al cielo evocando una respuesta  a tan fallido hombre que poco a poco deteriora al mundo. Hoy ya no busco respuestas, hoy solo miro la sabiduría de la naturaleza quien me permite mirar la inocencia infantil, o la magia que emanan los sentidos  de quien contacta conmigo. Hoy ya no miro al cielo… hoy solo bajo la mirada a mi origen,  ya no busco respuestas, me concentro en esculpir lo que habita en mi hogar y religiosamente oro porque cada acto que emano destelle bajo la luz de Dios. Gozo el instante entre la hermosa música  y el placer de respirar. Mis sentidos renacen aun cuando las décadas  enmohecen mi cuerpo. El sabor de la dicha es este instante, y aquí te dejo la esencia de mi alma... si has tocado la tuya sabras de lo que hablo

Los misterios de la vida son tan mágicos que sorprenden al alma y al espíritu.  Vertía la ira que me posee bajo el tintinear de mis dedos y la bondad del corazón, reconociéndola y aceptándola. Concluida tan bella declaración interior, me dispuse a salir para contactar con el mundo laboral, de pronto la magia de una carita angelical me hizo la parada para llevarlo a la salida del fraccionamiento…era Bruno, un alma infantil que me pedía llevarlo a la salida. Su cercanía elevo mi corazón, tras tocar con la mirada su inocencia y la sonrisa que me obsequiaba. Fue la primera señal que Dios coloco en mi corazón para iniciar un nuevo día  Llegando al trabajo, compartí con la red y agradecí a todos y todas  tan bellos oleajes de miradas que leen mis incipientes letras que inician a tomar el cauce de la poesía.....de pronto hubo que salir a la calle…  −y vaya! Sorpresa!; la calle que siempre es tomada para manifestarse con marchas ciudadanas por algún reclamo social….hoy se vestía de blanco,

"Las medias verdades no existen. La verdad es el todo, no puedes tenerla a trozos, no puedes poseerla por partes"

El destino no está enfrente, está detrás. El destino no se encuentra en un lugar adonde hayas de llegar, sino en un lugar que ya has abandonado. El origen es el destino. Esto debe ser comprendi­do muy profundamente. Si puedes retroceder hasta tu primer punto de partida, llegas al destino.

Divino Dios que pones en   mi camino la esencia de la ira. La toco y la emano cual manantial sagrado que siempre me ha habitado. La recibo sin ocultamiento alguno, mucho menos apretujamiento que endurece el rostro. Su sabor es frontal y directo, su calma apacible y gloriosa. Es la ira negada por muchos, enmascarada por la pulcritud servil y gloriosa para quienes la hemos moldeado cual arte sagrado e intocable. No es una cuestión de domesticarla, muchos menos de enmascararla…simple y sencillamente es esencia que late llena de energía y vida. Cada poro de mi piel se abre de par en par brindándole los cauces de la vida y vigilándola cual centinela que protege la naturaleza humana. Reconciliarme con su tormentosa energía es comulgar con ella bajo un hermoso oleaje de emociones que vibran en tan  hermosa alma que me has donado….una gota en el océano

Brillante fulgor surge de las profundidades para celebrar en la soledad, entre la suave música y la tenue luz  la dicha de Ser.

To­das las discusiones son tontas, porque si mantienes una acti­tud de confrontación nunca podrás entender al otro. Todo cuanto te diga será mal interpretado. Una mente decidida a ganar, a conquistar, no puede entender. Es imposible, porque la comprensión necesita una mente no violenta. Cuando in­tentas salir victorioso, estás siendo violento. La discusión es violencia. Puedes matar con ella, no pue­des resucitar con ella. No puedes dar vida con ella, puedes asesinar con ella. Las verdades pueden ser asesinadas me­diante discusión, pero no pueden ser resucitadas. Es violen­cia; la actitud misma es violenta. En realidad no pretendes la verdad, pretendes la victoria. Cuando el objetivo es la victo­ria, puedes sacrificar también la victoria. El objetivo debe ser la verdad, no la victoria, porque cuan­do el objetivo es la victoria eres agresivo, estás intentando de alguna manera sub­yugar al otro, dominarlo y tiranizado. Y la verdad nunca puede convertirse en una dominación, nunca

La iluminación es llegar al origen, y el origen está dentro de ti; la vida está allí fluyendo, latiendo, palpitando continuamente en tu interior. ¿Por qué preguntar a otros? sobre ti mismo. Es un absurdo absoluto pre­guntar sobre ti. Preguntar significa: buscar la respuesta. iY tú eres la respuesta!

Escuchar correctamente significa tener la capacidad de escu­char sin la mente.

Quién se conoce a sí mismo nunca se preocupa por lo que piensan de él. Pero quién no se conoce a sí mismo siempre está preocupado, porque todo su conocimiento consiste en las opiniones de los otros.                                                                                                                  Me conozco exteriormente, interiormente... voy abriendo brecha descubriendo que me habita  el amor incondicional y  la fuente de la firmeza para ir mas allá de las trivialidades de la vida. La comprensión siempre ha sido el ingrediente favorito que cultivo celosamente en cada uno de mis actos  y en todo mi ser de esta  vida mundana. La intuición es mi aliada predilecta.... me ha llevado a caminar delicadamente  entre las espinas  de la vida, mostrándome  que todo florece, que la vida aun cuando se torne gris e  impredecible al centrar la mirada en el corazón  te imanta cual mástil  inamovible en la tierra  y entonces, solo entonces las

Cual basto océano inmenso, profundo, bravío, sereno solté mi alma a Dios retorne a él… Aun cuando la mente tirana y parlanchina insistía en intoxicarme… He sentido su toque me he esfumado en su vacío, he vibrado con él. Basto un don que heredo a mi alma: quedarme en silencio, acallar la mente. En pocas palabras tirar la basura que me habitaba. Aquí estoy... cual gota en el océano que en cualquier instante se llegara a esfumar. En tanto; celebro la dicha y la esencia del alma…  

No sólo son únicas tus hue­ llas dactilares, tu alma es única.  

Las palabras son engañosas. Hablamos no para revelar, sino para ocultar. Así que calla y observa a la persona. El lenguaje del cuerpo es más verdadero que el de la cabeza. Además es muy, muy natural; proviene de la fuente misma, por lo que es muy difícil engañar con él. Puedes estar diciendo: « Estoy bien», pero tus ojos, tú misma actitud, la forma en que te mantienes en pie, dice que sabes que no es cierto. Puedes de­cir con tus palabras que confías, pero todo tu cuerpo tiembla por dentro. Cuando entra un ladrón, entra de una forma diferente. Cuando aparece un mentiroso, aparece de una forma diferente. Cuando camina un hombre sincero, camina diferentemente  No tiene nada que ocultar, no tiene motivo para engañar. Es sincero, su modo de andar es inocente. Basta con que hagas algo que tienes que ocultar, y entonces: tu cuerpo dirá que todo es diferente. Hasta caminando estarás ocultando algo. Tu estómago estará tenso, alerta, tus ojos miran a todas partes para ver si alguien te o

Es como soltarte en las marejadas de la vida: las olas elevan  tu alma al infinito, ó te ahogan la garganta sumergiéndote en la negrura del  abismo. Pero cuando el espíritu se encuentra iluminado eleva tu alma, aun estando en medio de las tempestades. Esa es la conjunción mágica, ese es el reto de la humanidad, ese es el poder de la persona, esa es la meta de la vida: “Ser”

He retornado al punto de partida "Si puedes retroceder hasta el punto de partida, llegas al destino"

Una puerta es una espera, una puerta es una bienvenida, una puerta es una receptividad. Te ha estado esperando  y has estado llamando a la pared. ¿Qué es la pared? Cuando empiezas por el conocimiento y no por el ser… estás llamando a la pared. ¡Conviértete!, ¡sé!. Si quieres conocer el amor, sé un amante. Si quieres conocer a Dios, sé meditación. Si quieres entrar en el infinito, sé oración. ¡Pero sé! 

Llegamos con las manos  vacías  y nos iremos con las manos  vacías   de modo que ¿para que reclamar tanto lo material? Sin embargo es lo  único  que hemos aprendido, es lo que nos dice el mundo entero que es lo correcto. Puede ser el dinero o puede ser una virtud; no importa con que clase de moneda comercies. Una verdadera  educación  no te enseñara a competir; te enseñara a colaborar. No te enseñara a pelear para llegar a ser el primero. Te enseñara a ser creativo, a ser cariñoso, a ser dichoso, sin compararte con los  demás.   No te enseñara a que solo puedes ser feliz si llegas primero. No encontraras la dicha si eres el primero en llegar, y si lo sigues intentando,  sufrirás  tanto que cuando lo consigas te abras acostumbrado al sufrimiento. Mis manos estan vacias y morire con las manos vacias

La oración es el  "enamora­miento" más profundo.

La vida no es un problema. Si estás intentando resolverla, te la estás perdiendo. La puerta está abierta, nunca ha estado ce­rrada. Si la puerta estuviera cerrada, los científicos hallarían la solución. Si la puerta estuviera cerrada, los filósofos hallarían un sistema para abrirla. La puerta no está cerrada a la vida, sólo la fe te lleva a salir por la puerta. Empuja la puerta y sal a la vida. La vida no es un acertijo que haya que resolver, es un mis­terio que hay que vivir. Es un profundo misterio, de modo que confía y déjate llevar.

Tenemos una semilla, tan pequeña, y luego nace un gran árbol. ¿De dónde viene este árbol? Observa la semilla, róm­pela e intenta encontrarlo. Si rompes la semilla, encontrarás vacío allí. De este vacío viene este gran árbol, de este vacío viene todo este universo;-de la nada viene el ser.

  Haz lo que estés haciendo con todo tu Ser. Piérdete en ello, pierde al hacedor en el hacer. No “seas”; deja que tus energías creativas fluyan sin obstáculos. 

La verdadera felicidad ocurre cuando lo supremo está plenamente despierto en ti. Cuando estas lleno de luz, cuando no hay obscuridad en tu interior. Toda la obscuridad ha desparecido y, junto con la obscuridad, el ego. Han desaparecido todas las tensiones, las angustian, las ansias. Te encuentras en un estado de absoluta satisfacción. Vives en el presente; se acabo el pasado y el futuro. Estas por completo aquí. Este momento lo es todo. Ahora es el único tiempo y aquí es el único espacio. Y de repente el cielo desciende sobre ti. Eso es la dicha, eso es la felicidad. Busca la dicha; es tu derecho inalienable. No sigas perdido en la jungla de los placeres; elévate,  ve en busca de la felicidad y después de la dicha.  El placer es animal; la felicidad es humana, la dicha divina.