Consuelo Barragán Flores

Al parecer es lo que vine hacer a esta tierra: “Un Viaje Espiritual” . Me leo atrevida, irreverente e irreal pero mi corazón me dice que es tan real la encomienda, que mi despertar a un nuevo día apuntalo la apertura de mis letras. Despertar, salir de la caja, mirar mi contexto desde otra perspectiva es la razón de mi viaje espiritual. “Vivir Espiritualmente” es el cometido por el cual vine a esta tierra. Tiempo atrás tiempo me volvía loca investigando la esencia de alma, la razón de ser del corazón y donde caramba se encontraba el espíritu cuestionamientos que me traían del tingo al tango investigando seriamente su origen, su existencia, su realidad. Afloro el entendimiento cuando la comprensión y la razón del vivir en esta tierra se aclaró poderosamente en esta mujer. Título que registre tiempo atrás para ser desarrollado y empoderado justo en este hermoso día que me está dando la clave, los pilares de tan increíble viaje espiritual. Decir viaje espiritual me centra y concentra en e

 

  Solo yo doy fe de mi aguerrida transformación.

La seriedad del ser responsable de mis acciones es prácticamente un debe tatuado en mi naturaleza. Una realidad perfectamente conocida. Cuando surgió la idea de fotografiar el sentimiento mas notable brotando de la mismísima fuente de mi vida a lo largo de siete días me lo tome tan en serio que cada testimonio que narro a continuación esta perfectamente solventado de responsabilidad. Siete días capturando sentimientos de preponderancia bastaron para reafirmar el vuelo inimaginable que este espíritu acaba de iniciar. Dia uno "La Serenidad es el Secreto de la Felicidad" Torne lo doméstico en calma. Torne una tarea hogareña en una oportunidad de vida para mirarme tal cual Soy . Realizar mis actividades domésticas en absoluta calma, desde el amanecer hasta el anochecer, fue una oportunidad increíble para descubrir cuan poderoso se torna este espíritu cuando es capaz de impregnarse de serenidad. Lo comprobé al cerrar el día uno, al sentir lo que la apacibilidad provoca en mi aun

“La fuerza de la vida no tiene edad para manifestarse” . Frase que registre por allá del 2020. Hoy que me vuelvo a encontrar con ella, me inspira para aplicarle fuerza a las letras que han de armonizar su significado. La fuerza de la vida me sienta al computador después de una larga jornada de trabajo para esbozar como es que sutilmente emana del corazón para hacer una radiografía de ella, como es que mueve mis dedos al teclado e inspira mis letras. Y por si fuera poco disciplina a este cerebro para orquestar una a una las letras que darán significado a eso que llamo “La Fuerza de la Vida” . He de iniciar por apuntar el tipo de fuerza al que me refiero, hablo de la fuerza espiritual, interna, motor de vida, energía o como quiera llamársele. Aludo a la fuerza que me impulsa para no dejar pendientes en el tintero de la vida sean del tipo que sean. En ningún momento apunto a la fuerza bruta, exagerada u obligada aquella que irrumpe abruptamente la esencia de la vida. La fuerza de la vida

Vitalidad y Acción son los agregados que le imprimo a cada meta que visualizo en el horizonte.

Descubrir, Aceptar y Anular mi Arrogancia es un Bendito Acto de Curación.

Despertar Despertarme me exige colocarme en el plano de la salud mental y para lograrlo debo estar conciente de mí. Despertarme me requiere mantener mi mente en absoluto despabilamiento, sin pensamiento alguno, en silencio, elevando vibraciones segundo a segundo para no atraer pesadez, desgano o apatía al cuerpo. El efecto es una increíble sensación saludable. Habituarme a despertar en serenidad, impregnándome de atención divina, sintiendo y pisando firmemente un nuevo día es mi rutina productiva. Cuando consagro mi despertar, consagro mis acciones del resto del día. Leer Posterior al despertar me preparo para leer, tomo del estante el libro que está siendo analizado e inicio a empaparme de sus letras. Adquirir el conocimiento es lo más loable que este cerebro ha logrado gracias a la práctica del aprender día a día. Y no hablo de aprender conocimientos generales, apunto al conocimiento espiritual, aquel que va abriendo betas de mi existencia, de mi razón de Ser , de purificar alma y co