Crear, Amar, Soltar

Crear, Amar, Soltar poderosas palabras que han capturado mis sentidos. Cuando digo capturado mis sentidos apunto a esa sensación de magia, descubrimiento y éxtasis por saberme renovada espiritualmente. Como algo tan simple llega a ser tan poderoso en Uno. La práctica de tres palabras que se comprenden, emprenden y concretan propocian una realidad distinta y expansiva. No me percataba que poseía mi propia utilería de autoreparación, saneamiento y crecimiento en el plano Espiritual, Mental y Corporal. Palabras que gestiono cotidianamente por voluntad, entrega y energia hecho que me aporta percepciones de la vida de forma distinta, detallada y precisa.  Una renovación y expansión distinta se apodera de mi al Crear, Amar y Soltar términos que apuntalo cual trabe cimentada que garantiza mi respirar saludable. Crear lo ejemplifico con un hecho que recién he colocado en la nube; Bono va a la escuela creación que me da satisfacción al percibir mis capacidades cerebrales, satisfacción al mirar el resultado, contenta por saber compartir. Crear no solo lo aplico a situaciones cognitivas, tambien lo aplico a mi mente cuando se intoxica y le urge purificarse creo situaciones de saneamiento para restablecerla instantáneamente, corporalmente cuando alguna dolencia invade mi cuerpo me aferro a sensaciones de sanación y el efecto sucede, emocionalmente desarrollo habilidades para vivir en el instante hecho que esquiva todo desajuste emocional. El instante es mi preciada pastilla espiritual que ingiero cuando urge rescatarme de cualquier injerencia desestabilizadoras. Creo permanentemente situaciones saludables con el afán de integrarme universalmente. Amar segunda palabra que rezo al unisonó con el resto de las palabras —crear, amar, soltar— Sagrada palabra —amar— por muchas vidas no comprendía tan preciado termino situación que me llevo a dar una pausa para esperar el momento de comprender la esencia del amor. Espere y espere hasta que una chispa de entendimiento me dio la respuesta: amarme es silenciar mi mente, es instalarme en el instante, es venerar mi templo triada de conductas que practico y practico incansablemente, practicas espirituales que propician amor incondicional en mi Ser luego entonces —amarme, es abrazarme profunda y expansivamente—. ¡Soltar, ahh! Una bocanada de aire entrando y saliendo fortalecedoramente se apodera de mi por saberme capaz de Soltar, si soltar el pasado, olvidarme del futuro y plantarme en el instante hecho que me ha graduado en materia de Soltar palabra que rezo cual imán que me imanta en el radar de la estabilidad existencial. Saber cómo deshacer cuanto nudo existencial me provoque, es saberme creadora y renovadora de mi templo. Instalarme en el instante es la clave que desenredo mi vida, purifico mi existencia y creo nuevos latidos de actuación. Sentir el instante apago llamaradas de explosividad, es la cura que cura todo mal que aqueje mi vida y si tanto palabrerío lo resumiera numéricamente quedaría así: 3 6 9 ahí tienes por qué vivo rezando el 3 6 9 números que representan el —crear, amar, soltar—