Historia Viva

Fotografiar mi escencia terrenal es vital porque constato y doy Fe de una "historia viva" que se ha desarrollado a base de espiritualidad, conciencia y voluntad.

Si de hablar de historia se trata, experta soy de ello, porque justo soy eso: "una historia viviente" una historia que se convertirá en polvo de estrellas cuando mi destino así lo marque. Ambulante viviente soy, ya lo decía en "Abriendo Brecha", cuando me inicie a deambular por la vida cual ambulante que se empapa de experiencias, formas de obtener recursos y no se diga el abrirse camino en un plano totalmente material. Mi primera experiencia de vender en la calle se inició a los ocho años, edad que abría una página de vida laboral, experiencia que se volveria a replicar a mis sesenta años. Rememorar dicha experiencia, seis decadas despues, me dejo totalmente congratulada por qué de no saber nada de la vida a mis ocho años pase a conocer el TODO, absolutamente el TODO de este mundo terrenal. Amo dichos recuerdos porque me llevaron a deambular por infinidad de experiencias laborales hasta el grado de decir "Gracias vida soy una historia viviente que sabe lo que dice"

No cabe duda que lo que más repele uno, es justo lo que a uno le toca vivir. Ser Educadora era lo que menos deseaba estudiar, tenía la obsesiva idea de ser Psicóloga, pero cuando uno no determina lo que va a estudiar, a uno no lo queda más remedio que obedecer. Obedecí a mi madre quien me leyó la cartilla; - o estudias para maestra como tu hermana o te regresas al pueblo – Bendita madre que realizo todas las gestiones para que su hija ingresara al Benemérito Instituto Normal del Estado de Puebla para ser Educadora reto que inicie, goce y culmine. Hazaña que gozo hasta el día de hoy, hazaña que me llevaría a laborar como educadora en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla por alla de mil novecientos ochenta y ocho. Mi destino ya estaba alineado, restaba descifrar el contenido de cada paso que daria por la vida. Mis aspiraciones por estudiar Psicología no habian cesado y siendo proveedora de mi propio sustento me dispuse a estudiar la Carrera de Psicología. Formación que ame desde el primer día que puse un pie en el salón de clases, hasta concluir dicha carrera. Soy Psicóloga, terapeuta independiente y es tal mi gozo que poseo la solvencia para decir -me cure, si me cure por puro conocimiento, formación, convicción y fuerza de vida. Y que tiene que ver tal declaración con la carrera que estudie, decía un ejemplar maestro – si son capaces de autoterapearse, autocurarse y autosanarse con capaces de dar solvencia moral a tan loable carrera.

Chéquese el año del calendario escolar que se encuentra al fondo, año que me iniciaría a dominar realmente la Psicología. Año que sin saberlo, me estaba pronosticando lo que seguiria, hacia donde me encaminaba. En aquel entonces ni pensar en el mito de la numerologia, imaginario al que no daba credibilidad, mi trabajo residía en aplicar la Psicologia y el resto solo era argot popular. Tonta, tan tonta que no me percataba que era real, tan real que mi historia me lo demostraria. Hoy no es lo mismo, hoy percibo, siento e intuyo lo que sigue, hacia donde caminar y como librar los obstaculos que se cruzan por mi vida. Domino el status quo de lo que me rodea y no es pretensión es práctica, experiencia, tropiezos e infinidad de extravios. Soy capaz de descifrar lo que sigue gracias a la nitidez de los mensajes que me envía la Divinidad, es mi fortaleza y me aferro a ella a tal grado que no existe forma de ignorarla.

Dominar los negocios era otra de mis aspiraciones, habiendo nacido entre comerciantes, sabia de la importancia de generar ingresos formalmente. No bastaba el deseo, la impulsividad o el ansia de abrir un negocio por abrirlo, reflexión que me llevo a estudiar la maestria en Administración de Empresas, formación que inicie y culmine gratamente  a mis cuarenta años, edad cuando uno ya sabe porque y para que estudia. Varias decadas se han requerido para bajar el conocimiento a la realidad, no basta la formación se precisa experiencia, práctica y altísima certidumbre de la meta que se persigue de no ser asi solo se emprenden y emprenden fracasos. Como consultora obtuve amplia formación en la gestión administrativa andamiaje que me encuentro fortaleciendo para completar mi rompecabezas de vida. Soy Historia Viva, amo ir dejando migas para evidenciar el camino recorrido. Gracias Padre, Gracias Madre, Gracias Mente viviente por darme la capacidad de escribir mi vida.