Fortalezas
Fortalecerme por voluntad propia es reflejo de la luz que voy encendiendo, labrando y perpetuando instante a instante. Cuando vivo momentos azarosos, grotescos, temerosos o evasivos me aferro a sentirme para verme, verme tal cual Soy. ¡Es una delicia aprovechar los instantes más densos de mi vida para traducirlos en luz! Cuando soy grotesca siento mi densa actitud arrastrándome a la obscuridad e inmediatamente reconfiguro mi conciencia para parar. Cuando el día se torna azaroso lo aprovecho para hacer alquimia conmigo. Cuando el miedo me invade prácticamente lo despido a fuerza de conciencia y si por alguna razón propicio evasiones me obligo a retornar para recomponer aquello que arruine. Ser poseedora de fortalezas no es gratuito el costo es alto, demanda disciplina para capturar lo denso de mi vida y transformarlo en conciencia, pureza, energía, serenidad.
♦Pesadez.
Si despierto con pesadez mi prioridad es centrarme para avivarme. Me fortalezco
al segundo de revirar la pesadez en lucidez.
♦Cerebro. Lo nutro con tareas que conlleven dosis de observación, análisis y atención. Pasito a paso genero acciones para fortalecer tan supremo órgano en esta cabeza.
♦Mente.
Sanear mi mente, fortaleza que casi logro. El casi es el cometido a
punto de florecer.
♦Confiar. Es la fortaleza con la que nací. Lo asevero porque recién la descubrí.
♦Ansiedad.
Veo que estoy invadida de ella y en tanto menos la nombre mas me fortalezco.
♦Negativa.
Mi gran pendiente de vida es atender mi negatividad, es atender los daños que provoque para reparar lo que
arruine.
♦Prejuicios. Por cada prejuicio que sale mi boca mi conciencia lava mi lengua purificándome verbalmente.
♦Quejumbrosa. Me descubro cuando me quejo y para cuando eso sucede prácticamente hago un alto a tanta irreverencia. Es la fuerza de la conciencia purificándome.
Comentarios
Publicar un comentario
Tus comentarios son bienvenidos