Dios

Al principio no te veía, mas tarde capte tus mensajes, aunque dudaba de tu presencia y mi cordura, tu halo de luz siempre me acompaño. Hace tiempo te buscaba desesperadamente, te buscaba por doquier y no estabas, me calmé y entonces te sentí, tu presencia sucedió en mí. Ahora te intuyo tan nítidamente que al parecer; mueves los hilos de mi vida. Una constante que me deja irradiando bienestar.


Comentarios

  1. Qué belleza de reflexión, eso nos pasa a la mayoría, tanta bulla no nos permite sentir su presencia y que todos los días nos habla. Un abrazo

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Tus comentarios son bienvenidos

Entradas populares de este blog

Rompecabezas

Energía

Ofrendas

Magnetizada

Cerrando ciclos