Salir del confort
Debieron sucederse incontables
experiencias para adquirir un nuevo aprendizaje, para atreverme a salir del
confort, aun cuando lo he incentivado en otros, vivirlo realmente es impresionante,
desgastante y alucinante aunque me lea exagerada así fue para mí salir del
confort para atreverme a experimentar un nuevo reto; transmitir
Más de una vez he estado en radio, televisión,
entrevistas e incluso hoy en día generando mis propios vídeos me requiere
ponerme frente a la cámara, burdamente pero lo hago, pero bien el punto no es
ese, el punto a tratar es; salir del
confort para transmitir el punto es profesionalizar el hecho, desde el
conectar un cable, hacer el guion configurar la cámara, preparar las luces, ajustar
el sonido, manejar más de dos programas para su edición e infinidad de detalles
que van surgiendo hasta llegar el momento de estar frente a la cámara. Una cosa
es hacerlo porque te invitan, pero otra muy distinta es ser el actor y ejecutor
de una transmisión a ello me refiero cuando digo: salir del confort y lo más valioso de esta serie de eventos reside
en lo que se quiere transmitir, eso es lo valiosísimo y en eso estoy; devanándome
la existencia para profesionalizar el instante, aún me falla, me falla
muchísimo. Posterior a una transmisión vuelvo a ver el vídeo y descubro mis
fallas desde el mirarme como me aterro, me volcó hablando como loquita, me pierdo en la
ilación de las ideas, repito una y otra vez lo mismo tanto que hasta me choco,
hablo incoherencias, es como si la realidad que me habita se pusiera al descubierto
y ah! qué mal se siente L me siento tan frustrada que ahí es donde mi cerebro me dicta, -ya no más- pero
justo ahí tomo la oportunidad para salir del confort. Quiero trabajar más en mí,
analizar mi lenguaje, caer más en el análisis, centrar las ideas, cuidar los
aspectos logísticos es decir detallar todo absolutamente todo aquello que
demande una transmisión para profesionalizarla hasta llegar al punto de la
naturalidad, es decir no hablar por hablar, hablar lo que me
dicta cerebro y corazón sabiamente. Benditas letras… puedo retornar a ellas
para revisar que queden lucidas y trasparentes sin que nadie me vea, pero en
una trasmisión me conecto y para cuando llega el momento de iniciar el solo
hecho exponerme a otras miradas me desestabiliza, además de poner al
descubierto el conocimiento y la esencia de lo que soy. He realizado más de una
trasmisión y sigo fallando. Lo más cómodo para mí habría sido decir; -ya no voy a transmitir- pero siempre
existe algo o alguien que me impulsa a continuar.
Continúo transmitiendo para
salir del confort y pulir mis aprendizajes los viernes a las once de la mañana
por mí canal. ¿Porque los viernes? porque es el quinto día de la semana y el
cinco es para mí sinónimo de compartir. ¿Porque a las once de la mañana? porque
el once es un número maestro, un número que me da energía, así de
mística soy y aunque sean locuras me da firmeza para atreverme a salir del
confort. Pero bien deseo cerrar compartiendo como se siente salir del confort:
todo tipo de obstáculos se presentan, el cerebro se niega a responder, me repite
una y otra vez que no tiene tiempo para más, que le pare, que si estoy loquita,
el corazón se estruja, las habilidades trastrabillean, la actitud se paraliza,
los conocimientos se olvidan y solo cuando entro en una profunda serenidad,
relajamiento y meditación entonces logro hacerlo. Pero bien este viernes
trasmitiré nuevamente y al bajar el vídeo para editarlo me calificare con el
corazón solo así sabré si estoy saliendo del confort para hacer las cosas bien.
Soy Consuelo y amo Ser.
Comentarios
Publicar un comentario
Tus comentarios son bienvenidos