Tan solo mira al cielo...

Cuando tengas tiempo, tiéndete en el suelo y mira el cielo.  Permite que esa sea tu contemplación.
Si deseas orar, ora al cielo. Si deseas meditar, medita acerca del cielo.  A veces con los ojos abiertos, a veces con ojos cerrados.
Pues el cielo también está adentro de ti; es tan grande afuera como adentro.
Estamos de pie en el umbral del cielo interno y del cielo externo, y ellos están en exacta proporción.
Tal como el cielo es externo e infinito, así es el cielo interno.
Nosotros estamos tan sólo en el umbral; de una u otra forma te puedes disolver.  Y estas son las dos formas de disolverse;
Si te disuelves en el cielo externo; entonces eso es oración.
Si te disuelves en el cielo interno; será meditación.
Pero finalmente se tornará lo mismo: si te disuelves.
Y estos dos cielos no son dos… son dos sólo porque tú eres… tú eres la línea divisoria.
Cuando desapareces, la línea divisoria desaparece  Y entonces, lo de adentro está afuera y lo de afuera está adentro, entonces eres un solo cielo.

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