Madres Divinas!

Que el amor que las habita y les rodea en su hogar sea el roció que toque su corazón en este día....Felicidades!
Ella me dio vida, ella sembró las semillas que abrían de germinar.
Ella engendro ocho almas y partió.
Siete semillas aun laten con vida.
Semillas que solo la conciencia nos llevara a florecer. 

Quizás para otros sea la mas pequeña. Para mi… es la grandeza divina.
Pura en alma y espíritu.
Lucha en la vida dejando estelas de coraje y entrega. 
Lucha por sus hijos, lucha porque sabe que es lo correcto.
 Lucha, porque sabe amar.
Así es  la sabiduría de millones de madres que habitan esta tierra….
 y una de ellas es mi HERMANA.

Ahhh!!! el solo disponerme a dejarle unas letras…ya me robo el corazón.
De niñas peleábamos aguerridamente.
 De madres peleamos aguerridamente  por un sueño.
Me enseño que luchar vale la pena; cuando la nobleza y la verdad son una realidad, cuando de compartir  se trata, cuando la compasión toca al corazón.
Ingredientes no de una madre, ingredientes de hombres y mujeres que conocen el valor de AMAR. Y me llena  de orgullo decir que es; mi HERMANA. 

Caminando por rincones universitarios, encontré a mi amiga. 
A mi amiga del alma. El contacto fue casi inmediato. 
Ambas nos sabíamos unidas por esa hermosa virtud: la amistad
Mi amiga…es una madre que me deja mirar su dulzura y entrega a la vida. Una madre que se entrega a Dios para caminar gloriosamente. Una madre que emana virtudes...
es divina y es madre!

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