Dormidos


Estamos dormidos.  Nuestro comportamiento no es un comportamiento al que podamos denominar alerta, atento, consciente.  No lo estamos.  Ni por un solo instante podemos ser conscientes de nosotros mismos.  Pruébalo y siente cuán profundamente dormido estás.  Si no me puedo recordar durante un solo minuto, durante sesenta segundos, ¡cuán dormido debo de estar!

Comentarios

Entradas populares de este blog

Barro hediondo

Cuatro palabras

Serenidad

Sintonizar con la vida

Fuerza de voluntad