Dominantes?

Una persona que se siente sola no se puede relacionar porque su necesidad es muy grande; se aferra, se apoya en el otro.  Trata de poseer al otro porque tiene miedo constantemente: “Si el otro se va ¿entonces qué?  Me quedaré solo o sola”. Por eso existe tanta presión en el mundo.  Hay una razón, y es simple: tienes miedo; si el otro se va, entonces te quedarás solo, te sentirás completamente solo.  Y eso no te agrada, la sola idea te hace sentir desgraciado.  ¡Posees al otro! Por eso el amor se convierte en algo miserable.  El amor se convierte en dominación.  Porque la gente que se siente sola no puede amar.

Los que se sienten solos no tienen nada que dar, únicamente se dominan los unos a los otros.  Naturalmente, cuando tú no tienes nada que dar y el otro trata de dominarte, comienza la lucha.  Quieres dar el mínimo posible y obtener el máximo; el otro hace lo mismo que tú, y ambos hacen de la relación una miseria el uno para el otro.