gloria a DIOS en las alturas

Despertar hablando de otros es lo más estúpido que me puede suceder.
Poseo la capacidad de observarme y cuando hago este tipo de actos contaminantes empañan mi sagrado despertar……. Veo que aun las paredes de mi SER tienen residuos de contaminación mental. Y serán mi pretexto para compartir un sábado de gloria.
Retornando a la cordura con mi música favorita, los pajarillos que atraen mis sentidos y el fresco aroma del amanecer me traen de regreso para centrarme.
Gloria a dios que vive en las alturas, gloria a dios que vive en las alturas, una y otra vez las escuchaba cuando la vida sin preguntarme me adoctrino, y debo confesar que por un tiempo  invadieron mi corazón y mi fe.
Así es…llego un momento de mi vida que solo miraba al cielo preguntando a Dios: porque?, porque tanto dolor en el mundo, porque tantas lagrimas de hijos y madres sufriendo, ya no para vivir humanamente, para sobrevivir y alimentar sus cuerpos, porque tanta riqueza en unos cuantos?, porque tantas manifestaciones de poder humano para aplacarnos entre humanos, porque?... y aquí me detengo, pues soy capaz de caer en la irritabilidad, y eso enmugrece las paredes de mi SER.
Llego un momento que me encontraba tan perdida y tan sola que solo miraba al cielo no para exigir, no para reclamar  mucho menos para lamentarme con el tan trillado porque a mí?.... Miraba al cielo aferrándome a algo, a alguien o quizá sembrando esperanzas,  pues me habían asegurado que él  habitaba el cielo….así que ahí lo buscaba implorando: ayuda….ayúdame Dios mío!!!
Así de sangrante,  sin esencia, con sonidos huecos que semejaban oraciones trillantes…. una y otra vez……una y otra vez. Y exprimiendo mi Ser hasta dejarlo muerto en vida. Así fueron las costumbres del pasado resguardadas en mi corazón, esperando...siempre esperando, y escuchando decir; va a llegar, ten fe, va a llegar, solo los que sufren y padecen estarán en la gloria de dios. Que aberración tan fatal permití entrar a mi alma, en fin estoy liberada…..y eso me basta.
No es la cultura, no es la sociedad, y mucho menos mis seres amados quienes me llevaron a mirar a dios en las alturas. Fue una mujer que confió, que se aferraba a dios, que les permitía a otros conducirla hasta él. Solo yo doy cuenta de esos actos, solo yo erigí esas creencias, solo yo padecí y sufrí el desencanto de no encontrarlo en el cielo.
Si hablas conmigo o miras mi rostro veras la dulzura e inocencia que soy capaz de plasmar en el, pero si llegas a conocerme en la cotidianeidad de la vida, miraras la rigidez y la disciplina que me impongo para vivir dentro y fuera de las costumbres sociales y culturales, solo así sobrevivo y me lleno de cordura emocional.... y solo así he llegado a encontrarme con él. Es consuelo quien se pone al descubierto para dar la bienvenida a la gloria de un iluminado que me mostro la esencia de quien me habita…al fin siento y vivo    a DIOS.
Ya no lo busco en las alturas, ni en los espacios que me representen adoctrinamientos. Solo me basta abrir los ojos para mirarlo y sentirlo.
Hoy es mi gloria…..mis ojos miran al cielo para gozar su creación y bajan la mirada para sentirlo  latido tras latido, respiración tras respiración y acto tras acto...es Dios quien guio mis manos para compartirlo.

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