crecimiento
Todo
crece a tu alrededor. Para el crecimiento se necesita tiempo; así que parece
lógico que el crecimiento espiritual también requiera de tiempo. El crecimiento
espiritual no es en realidad un crecimiento como el de la semilla. La semilla
debe crecer para transformarse en árbol. Entre la semilla y el árbol, hay una
brecha. Esta brecha debe ser recorrida; hay una distancia. Tú no creces como
una semilla; tú ya eres el crecimiento. Es sólo una revelación. No hay distancia
entre tú como eres y tú como serás. ¡No hay distancia! Lo ideal, lo perfecto,
ya está allí.
Entonces,
no es verdaderamente una cuestión de crecimiento. Es una cuestión de recorrer
el velo; es un descubrimiento. Algo está escondido; corres la pantalla y allí
está. Es como si estuvieras sentado con los ojos cerrados: el sol está allí
sobre el horizonte, pero tú estás a oscuras. De pronto, abres los ojos y es de
día, hay luz…cbf
Comentarios
Publicar un comentario
Tus comentarios son bienvenidos