una oración

Deja de lado todas las postergaciones, golpea al momento, y serás tan hermoso como los lirios en el campo de los que habla Jesús: ni siquiera Salomón, en la cúspide de su gloria, era tan bello.
Tú eres bello, ¿por qué te desgastas: Eres divino, por qué te desgastas? Eres lo esencial, ¿por qué te pierdes en mañanas, en preparativos futuros, en la mente? ¿Por qué malgastas tu energía vital eres el desierto del tiempo? Está aquí y ahora, y este "aquí y ahora" se convierte en la puerta. Y la puerta siem­pre te está esperando. Sólo golpéala. Con sólo golpearle, se abre.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Barro hediondo

Cuatro palabras

Serenidad

Sintonizar con la vida

Fuerza de voluntad