llorar


Ante el silencio de la obscuridad que me regala el amanecer, he llorado apretujadamente en el instante que mis ojos recorrían: “vislumbres de una infancia dorada”. Apretado el sentimiento se negaba a salir. Mi garganta rugía de dolor por la vergüenza que negaba dar salida a las gotas de agua salada por mis ojos.., tal despliegue emocional se ha debido al simple acto de leer a tanta sabiduría, dejando en mi alma huellas de felicidad. Al fin mi realidad interior me grita; "no estabas equivocada". Solo entonces las lágrimas fluyen como el rió por el camino que les ha trazado mi rostro. Es dios que llego para habitarme…cbf

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