Mis letras!

Ahora que me detengo a releer lo que fue escrito por mis dedos en el pasado descubro que faltan textos, escasea el sentido, hace falta pulcritud y me encanta descubrirlo, me puede fascinar releerme, ver mi evolución ante tales atropellos a la lectura y los dejare así, porque así dio inicio la aventura de escribir. Primero eran copias de otras mentes, después ira saliendo de mi valioso corazón, más tarde tristeza por no encontrar salida en la vida y ahora un deleite para el corazón quien rebosa de sobriedad y eso merece no borrar ni cambiar absolutamente nada de lo escrito. Dejare la fealdad, el aburrimiento o el espanto del pasado de mis letras pues son la exquisita evidencia de mi evolución. No existe nada mejor que echar una mirada al ayer para ver como uno es capaz de transformarse, de dar saltos cuánticos para delinear la vida mediante letras. Cierto es que lo escrito en el pasado esta empañado de torpeza pero gracias a la inteligencia y el corazón mis letras hoy emanan esencia celestial.

Mis letras vierten mi realidad, dejan constancia de mis actos y si precisan pinceladas de coherencia pues solo retorno a ellas para darles el toque final. Es como fotografiar a Consuelo por dentro y por fuera, es como si cada letra llevara fragmentos de mí.