Mi cara

Es momento de tocar la realidad. La realidad de mis caras. Es momento de cristalizar las caras que han respirado por si solas.

Al nacer mi cara  reflejaba inocencia y alegría de un alma dispuesta a vivir. Al poco tiempo la cara se tornó triste, con miedo  y hasta  insegura…efecto de la transformación mental. Y muy en mis adentros se alojaban los sueños y las ilusiones como apretujándose para no desbordarse con locura. Llego el momento de una cara que tocaba la dicha momentáneamente. Y era tal la alegría que me embargaba segundo a segundo que mi cara solo denotaba una amplia sonrisa.

Llego la cara del coraje, de la rabia y hasta la frustración dejando al rostro envejecido de la noche a la mañana. Todo se tornaba gris, solo tocaba actos llenos de negrura. Como dando pasos en la obscuridad aun cuando el día tintineaba en mis pupilas para atraer mi corazón.

El miedo toco mi cara. Y aun cuando ya lo había tocado de niña, como un mecanismo que me acompañaba. Ahora el miedo tocaba mi cara medularmente apoderándose de mí hasta congelar mi cuerpo. Quizá fue la cara que me llevo a morir en vida.

Hoy mi cara conoce la realidad de la vida. Hoy mi cara se ha desprendido de falsos paradigmas, Hoy mi cara por fin conoce el sabor de la dicha y mira con los ojos de Dios. Hoy mi cara renace llena de amor y descubrimientos eternos. En tanto respire mi cara la realidad circulara por si sola, alejada de toda contaminación mundana….hoy mi cara habla por si sola.