Patrones Mentales
No es el aire que respiro quien enferma mi cuerpo, no es mi destino enfermarme, son los patrones mentales quienes abren las puertas de la infelicidad para enfermar el alma, lo sé porque el día que desconfigure mis propios patrones mentales la enfermedad en este cuerpo se evaporo. Lo logré cuando me valí de tratamientos sabios e inteligente para mantenerme en salud espiritual. Gracias a Dios me rescate por voluntad propia en pleno siglo veintiuno. Nací en el siglo veinte y expresar -siglo veintiuno- una tonelada de tiempo me cae de repente, entonces reflexiono; -cuan valioso ha sido mi crecimiento espiritual- -cuan afortunado es llegar a comprender el secreto de saber aplicar fuerzas superiores a inferiores- -cuan afortunado es llegar a comprender la paradoja divina-. Que delicia mirar por la ventana de mis letras para atestiguar que uno es capaz de brillar por gracia divina. En palabras terrenales diría que me encuentro desparasitada, desprogramada y hasta purificada mentalmente. Cuan...